Translate

martes, 23 de junio de 2015

El Castillo de Alcaudete


En el importante enclave y zona de paso obligada conocida como al-Qabdaq (o ciudad de los manantiales), hoy Alcaudete, se encuentra uno de los castillos mejor conservados de la provincia y punto obligado de visita, por ser testigo del paso del tiempo y crisol de culturas dotado de una compleja estructura por la que adquirió su fama, el Castillo calatravo de Alcaudete.

Este castillo, fue declarado Monumento Histórico en el año 1985 y es otra de las visitas interesante en tu paso por Alcaudete.

Los árabes levantaron esta imponente fortaleza que alcanzó fama de inaccesible en el periodo califal. Siendo centro de protección de una medina comerciante muy activa, y fue militarmente codiciado tanto por musulmanes como por cristianos.

Desde que Alfonso VI la reconquistara por primera vez en el año 1085, y durante los siglos siguientes, la fortaleza cambió varias veces de manos entre castellanos y andalusíes. Incluso después de la batalla de las Navas de Tolosa y el avance de Fernando III no cesaron los trueques. Así, el rey Santo la cedió al rey moro de Baeza, luego a la Orden de Calatrava, en periodos intermitentes volvió a estar en manos de los nazaríes, hasta que en el año 1340 Alfonso XI la reconquistara definitivamente.

El castillo que hoy en día podemos ver, fue reconstruido por la orden de Calatrava entre los siglos XIII y XIV.

La planta del castillo de Alcaudete es de forma poligonal, adaptándose a los escarpes del cerro sobre el que se asienta. Tenía seis torres, de las que destaca la del Homenaje.
La puerta principal se encuentra en el extremo norte, está formada por un arco de medio punto enmarcado por un alfiz, y se encuentra defendida por dos torres. En el interior, un pasillo-foso fortificado garantizaba la vigilancia.

El visitante que se adentre en sus límites podrá constatar la admirable labor de restauración llevada a cabo recientemente en la fortaleza. Aún así, la mayor parte del conjunto se conserva en buenas condiciones, reservándose la intervención a parte del mismo, y el viajero tendrá la impresión desde que ingresa por la puerta de haber sufrido un viaje en el tiempo.

El castillo fue erigido en lo alto de un cerro aprovechando los propios desniveles del terreno como elemento defensivo con seis torres y varios aljibes para la recogida de agua; ha llegado a ser famoso por su inaccesibilidad y objeto de envidias tanto de musulmanes como de cristianos por su condición de fortaleza inexpugnable. Tanto es así que fue declarado monumento histórico en el año 1985.

Así, hoy día es posible conocerla a fondo a través de todo un sistema de renovación que nace con los objetivos de mantenerlo como elemento vivo y en uso, así como para dar a conocer la propia historia del municipio y la del edificio.

Sus enormes muros albergarán este nuevo centro de interpretación de la Orden de Calatrava que nos permite instruirnos en la evolución y transformación que experimentase desde su construcción, primero como fortaleza árabe desde donde se hacia posible controlar los caminos de paso debido a su estratégica posición.

La importante incursión de la orden de los famosos caballeros monjes-guerreros de Calatrava durante los s. XV-XVI, cuyo papel fue primordial como combatientes y defensores acérrimos de la fe cristiana, así como todos aquellos elementos de defensa y ataque empleados como sistema para mantener la paz y el orden en la ciudad fortificada.

Todo esto se completará con interesantes proyecciones, juegos de luces y visitas teatralizadas para disfrute y diversión del visitante de esta maravilla de la arquitectura medieval, que podrá revivir en su imaginación toda esta época de quimeras, nobles, monjes guerreros, villanos y gestas épicas, rodeados de un increíble entorno natural salpicado de verdes olivares.